Vamos en el auto de Cecilia Ubilla rumbo al campo de su familia, camino a Cancura. La pasamos a buscar a su comando en calle Andrés Rosas, justo detrás del Municipio y salimos rumbo a la casa en que se crió y pasó los mejores momentos de su vida –asegura-.
Mientras tomamos la carretera nos muestra su álbum de recortes de prensa. “Ahí puedes ver que como digo, no soy una aparecida”. Es verdad, antes de la era Google, Cecilia Ubilla ocupó páginas de diario desde los años ochenta, en que se destacaba como secretaria municipal y a consecuencia de ello, alcaldesa subrogante, bordeando los treinta años.
Toda su vida la ha pasado en Osorno, a excepción de los años de universidad, que los pasó en Santiago, formándose como abogada en la Universidad Católica y como gremialista junto a quienes hoy conducen el país.
“Fuimos compañeros con muchos de los que hoy son ministros y senadores, por eso cuando voy a votar al consejo nacional del partido voto primero por mis compañeros y después por el resto”.
Esos años en Santiago marcaron su vida, allí conoció a Jaime Guzmán, “él hacía Derecho Constitucional en años en que no estaba vigente la Constitución, pero yo cursé ese ramo en Concepción, antes de cambiarme a la Católica”, cuenta.
De la candidata más joven a la candidata única
Se considera una persona optimista y tremendamente afortunada. Cree que lo uno es consecuencia de lo otro. Dice que uno de sus “pecados” es la falta de ambición. Pese a ello, desde muy joven estuvo a la cabeza del acontecer político de la ciudad. “Cuando trabajaba como secretaria municipal la gente me decía que postule al Municipio, en ese entonces como candidata a alcaldesa y concejal al mismo tiempo”. Así fue como en 1992 tuvo su primera experiencia electoral. “No me tuvieron fe en mi partido y me pusieron tercera en la lista. Si me hubieran potenciado poniéndome más arriba, seguro salía”. Aún conserva los afiches y recuerdos de aquella campaña de hace 20 años, y los muestra con orgullo.
Llegamos a la casa que su abuelo construyó hace más de 70 años. Llegó a Osorno construyendo adoquines desde el norte y aún hay calles que los conservan. “Mi abuelo llegó con sus hermanos a esta zona y se quedaron para siempre”. La casona familiar es grande, amarilla y rodeada por un gran y bien cuidado jardín. Junto a la casa está la morada de los cuidadores de la vivienda, que hoy está desocupada. “Mi mamá tuvo un problema de salud así que está en Osorno conmigo”.
Recorremos los jardines y recuerda su infancia junto a sus primos y amigos jugando en el tranque y andando a caballo. “Tuve una infancia muy feliz y la recuerdo con mucho cariño”. Hoy es el lugar que alberga los “Ubillazos” como denomina a sus grandes encuentros familiares.
Incluso es un lugar de retiro para reuniones políticas. “Aquí decidimos que yo sería la candidata de la UDI en esta elección y aquí hemos trabajado en el programa municipal”.
Cuenta que la decisión de ser la figura que representaría a toda la Alianza no fue fácil, “estaba en una situación complicada porque en un momento teníamos dos candidatos y de pronto no teníamos ninguno, pero yo siempre estuve disponible, nunca le hecho el quite a las grandes responsabilidades”, señala.
“Lo más urgente es traspasar el poder a la gente”
Nos hace pasar y vemos una gran cantidad de fotografías familiares y objetos de colección y recuerdo, tanto de la familia como souvenirs de viajes. Entramos a la sala de estar, donde le gusta pasar el tiempo libre bordando, leyendo o conversando con amigos.
Se sienta y comienza pensar qué hará si gana la elección del 28 de octubre. “Celebrar a concho, voy a convocar a todo el mundo, porque todos los osorninos tienen el derecho de llegar a la municipalidad y voy a ponerme a trabajar en los planes más urgentes, que son el traspaso del poder a la gente, delegaciones municipales, la construcción del primer Centro Cívico en Rahue para darle la importancia que se merece”.
Piensa en los equipos y en conservar a los funcionarios municipales. “La gente que trabaja en el municipio tiene alma de funcionario, pero hay que motivarlos, hay que hacerlos sentir parte de un equipo, porque hasta aquí todo ha estado muy centrado en la autoridad”.
En el corazón del Osorno rural, le señalamos que no se ve por parte del Municipio una política hacia el mundo rural. Responde que “Hay que incentivar los villorrios rurales y eso se puede trabajar en conjunto con las empresas agrícolas. La principal prioridad de la Municipalidad tiene que estar con el campesino, y tiene que ver con el emprendimiento. Por otra parte tenemos que acercarle los temas tecnológicos y de asociatividad”.
“En el Municipio uno no puede tener ninguna relación de interés”
La probidad y la transparencia en las licitaciones en el Municipio han estado en entredicho desde hace varios años. Licitaciones que se repiten y relaciones de interés dentro del Concejo Municipal que pocos se atreven a decir en voz alta, pero que todos conocen.
¿Qué va a hacer Cecilia Ubilla en este tema si llega a la alcaldía?
“Lamentablemente Chile es un país súper legalista y se requieren normas para hacer las cosas. Hay una iniciativa respecto de las relaciones de convivencia, pero uno debe trabajar por la conciencia y la responsabilidad personal. En el caso de José Luis Muñoz, su pareja es la persona que está en el portal de Chile Compra. Si yo fuera alcaldesa no permitiría una situación así por ningún motivo”.
¿Cree que hay conflictos de interés en miembros del Concejo Municipal de Osorno?
“No puedo dar hechos concretos ni nombres, pero me llama profundamente la atención que existan licitaciones que se estén repitiendo históricamente. A veces dejan a la gente fuera de bases por papeles que tiene la misma Municipalidad. Entonces siento que si uno que tiene la responsabilidad de fiscalizar, no puede tener ninguna relación de interés. Yo entiendo que una persona que tiene el mismo domicilio sí tiene algún interés”.
